lunes, 8 de diciembre de 2008

El miércoles 17, asamblea



Miércoles 17 de Diciembre, Asamblea sobre el futuro de la Fábrica de Gas de Oviedo. A las 19:30 h en el salón de actos de la Biblioteca del Fontán.

martes, 25 de noviembre de 2008

Viena no pierde Gas, ¿y Oviedo?













Imágenes de la fábrica de Gas de Viena donde los gasometros han sido recuperados como cine, teatro, facultades y residencia de estudiantes. ¿No podríamos hacer algo parecido en Oviedo con con nuestra vieja fábrica de gas?







El Foro de Urbanismo Crítico de Oviedo convoca para el 17 de Diciembre un debate ciudadano sobre el futuro de la Fábrica de Gas. Será a las 19:30h y está todo el mundo invitado a participar y traer ideas.






martes, 21 de octubre de 2008

Asamblea en defensa de la Fábrica de Gas y los Chalets de la Vega


Martes 21, 19:30 H en el LLAR SOLIDARIU (C/ Gascona 12).

La convocatoria es totalmente abierta.

* Fotografía: Helena Álvarez

lunes, 29 de septiembre de 2008

3.000 pegatinas en apoyo a la creación de un centro cultural en la Fábrica de Gas de Oviedo


El Foro de Urbanismo Crítico de Oviedo y la Asamblea de Ciudadanos por la Izquierda repartirán 3000 pegatinas en apoyo a la conservación de la Fábrica de Gas de Oviedo y su recuperación como centro cultural.

sábado, 20 de septiembre de 2008

Pedir lo posible

Arranca este mes una campaña para reclamar que esa joya de la arquitectura industrial asturiana llamada Fábrica de Gas de Oviedo se convierta en un centro cultural con salas de exposiciones, conciertos, teatro... Hace falta que todo el mundo eche una mano para lograr que se consiga que este emblemático edificio de Oviedo se convierta en ese gran contenedor cultural que esta ciudad tanto necesita. De momento ya andan circulando por bares y chiringuitos pegatinas en apoyo a la reivindicación.Seguiremos informando

martes, 17 de junio de 2008

Arranca la campaña por la recuperación de la Fábrica de Gas de Oviedo y los chalets de la Vega


S.N (El Comercio) Quedaron en el local de Cambalache y, curiosamente, se sentaron con la misma forma que uno de los símbolos de su lucha, el circular Gasómetro. La asamblea convocada ayer por Asamblea de Ciudadanos por la Izquierda (ASCIZ) y el Foro de Urbanismo Crítico reunió ayer a una treintena de personas que debatieron sobre cómo salvar «dos espacios vitales» y en «peligro», la fábrica de Gas y La Vega. Al finalizar el encuentro, acordaron las primeras medidas: la plataforma creará un manifiesto e iniciará de forma inmediata la recogida de firmas. Los promotores de la campaña recordaron ayer la situación de ambas fábricas. La de Gas está pendiente de la tramitación de un plan especial por parte de HC, donde se proyecta la construcción de 95 viviendas y se debate sobre qué elementos conservar en la parcela de 11.000 metros cuadrados. El portavoz de Asamblea de Ciudadanos por la Izquierda avanzó sus planes el pasado viernes, durante la presentación de la su propuesta y ayer los repitió. «No queremos que esto se destine la especulación, sino a un contenedor cultural», recordó.Entre sus propuestas está la expropiación del complejo para que el Principado y el Ayuntamiento impulsen un gran centro de arte, de características similares a La Laboral, en Gijón. En cualquier caso, su proyecto aún no está cerrado y crearán una comisión de expertos para unificar ideas.Uso social En el caso de La Vega, la plataforma luchará por la recuperación de siete chalés. «Estamos hablando de un sitio neurálgico, de un patrimonio que hay que reconstruir para darle uso social», dijo Rivi. El colectivo ya ha lanzado varias ideas: una guardería, un centro de salud, un centro de día y una biblioteca, son algunas de ellas. Pero estos espacios no son propiedad municipal ni regional, sino del Ministerio de Defensa. Para cambiarlos de titularidad, el grupo pedirá la implicación del presidente regional, Vicente Álvarez Areces, y el alcalde, Gabino de Lorenzo.Sánchez Ramos también adelantó ayer que celebrarán una segunda asamblea con vecinos la primera quincena de julio. Algunos ya asistieron a la reunión de ayer, que congregó también a trabajadores de la fábrica de armas y asociaciones culturales.

ASCIZ y el Foro de urbanismo Crítico proponen recuperar los chalets de la Vega y convertir la Fábrica de Gas de Oviedo en un gran centro cultural

Un proverbio chino, recordado ayer por Roberto Sánchez Ramos, dice que 'El gran arquitecto del Universo hizo que el hombre tuviera dos orejas y una sola boca porque quiso que escucháramos el doble de lo que hablamos'. Después de oir durante años cómo se especula con proyectos para la fábrica de Gas, el portavoz de ASCIZ y el Foro de Urbanismo Crítico se limitaron ayer a lanzar una sola propuesta conjunta: «queremos hacer allí el gran contenedor cultural de Oviedo, en la línea de lo que está siendo La Laboral y lo que próximamente tendrá Avilés (el Centro Internacional Oscar Niemeyer)».
Elegido el fin, al colectivo le queda ahora la complicada tarea de lograrlo. Ya se ha puesto manos a la obra. El próximo lunes, a partir de las 19.00, celebrará una asamblea en el local de Cambalache (calle Martínez Vigil) para analizar las propuestas y crear un gran movimiento asociativo de ciudadanos para defender este complejo y otro que está en peligro, la fábrica de armas de La Vega.
Sánchez Ramos, que compareció ayer con los responsables del Foro de Urbanismo Crítico Diego Díaz y Miguel Moro en la sala de prensa municipal, adelantó que se dirigirá al alcalde para lograr este nuevo espacio cultural en la capital. «Que mejor oportunidad, Gabino, de que te dirijas a HC y digas ahora que ese espacio lo quieres para tu pueblo. Lucha por esto, como otros lucharon por lo suyo y haz de alcalde y no de promotor inmobiliario», le espetó el portavoz de ASCIZ.
La plataforma quiere frenar los planes de la empresa eléctrica, propietaria de los 11.000 metros cuadrados del solar, donde se pueden construir, según el Plan General de Ordenación Urbana, 95 viviendas. «Es vergonzoso que una compañía con beneficios millonarios saque provecho de la especulación urbanística», dijeron. Pero no sería la primera vez que lleva a cabo estas prácticas: «hace ocho años hizo lo mismo en Ciudad Naranco, y derribó la famosa centralita para hacer viviendas», recordó.
Rivi pidió a las tres Administraciones que impidan el derribo y sigan la línea de otras ciudades. En San Sebastián, por ejemplo, convirtieron su fábrica de gas en filmoteca, y Madrid transformó su antiguo matadero en centro cultural.
Difícil compra
Los tres representantes anunciaron la propuesta al tiempo que reconocieron que una expropiación sería muy costosa. Primero, la Consejería de Cultura tiene que declarar Bien de Interés Cultural la fábrica de gas y después, hay que llegar a un acuerdo con el dueño de los terrenos para su compra. «Es mayor inconveniente es que no es lo mismo hacerse con unos terrenos de fábricas que de viviendas, el valor del suelo no es lo mismo», dijeron.
Tampoco se olvidaron de la fábrica de armas de La Vega, ni de sus trabajadores, ni de sus chalés. Rivi recuperó una vieja demanda y recordó que son 3.000 metros cuadrados de jardines y viviendas en perfectas condiciones que podrían recuperarse como equipamientos públicos. Propuso dedicarlos a escuelas infantiles, un centro de salud o un centro de día.

lunes, 9 de junio de 2008

Asamblea del Foro de Urbanismo Crítico en el local CAMBALACHE

El Foro de Urbanismo Crítico de Oviedo convoca una asamblea el lunes 16 a las 19:00 en el local Cambalache para poner en marcha una campaña en colaboración con todos los colectivos y personas interesadas en trabajar por recuperar la Fábrica de Gas de Oviedo y los chalets de la Fábrica de Armas de la Vega para usos sociales (locales de asociaciones, equipamientos para los barrios...) y culturales (salas de teatro, exposiciones o conciertos, filmoteca, museo, etc...).

¡Todo el mundo está invitado!

jueves, 24 de abril de 2008

Unas 300 personas secundan los actos de la plataforma por las bibliotecas

x Covadonga Murias (El Comercio)

Una veintena de representantes del ámbito de la cultura participan en un foro con intervenciones y lecturas El escritor Paco Abril resalta en la apertura que los libros se consideran peligrosos «aun en democracia»


En la puerta del hotel España, un anciano pregunta: «Mozo, ¿vas al acto por la cultura?» Y agarrándose al hombro de un joven, entra en el salón. Allí se reunieron ayer cerca de 300 personas, entre anónimos y conocidos, para apoyar los actos de la plataforma por la defensa de la red de bibliotecas de Oviedo que se desarrollaron aprovechando el Día del Libro.El foro, presentado por el escrito Paco Abril y organizado por el Grupo Municipal Socialista y la Asociación de Ciudadanos por la Izquierda (ASCIZ), contó con la participación de una veintena de representantes del ámbito de la cultura, que realizaron pequeñas intervenciones y lecturas. El objetivo era apoyar a los 12 bibliotecarios a quienes el Consistorio no renovará el contrato a finales del mes.




La peligrosidad del trabajo del bibliotecario fue el punto principal de la lectura de Abril. «Deberían llevar casco», afirmaba momentos antes de leer su aportación, en la que subrayó que los elementos más inflamables que existen «son los libros y los lectores». Por ello, «la censura de las bibliotecas es la primera medida de todas las dictaduras», añadió. Aunque a los participantes les unía el compromiso con la promoción de la cultura, el acto no pudo ser más variado. Un inmigrante senegalés, Madú, quiso realizar su particular homenaje a una de las bibliotecaria, «vamos a llamarla Sofía», en cuya biblioteca afirmó haberse sentido «como en casa; y he podido borrar la soledad y la tristeza», afirmó.Mientras se desarrollaba el foro, varios niños jugaban y pintaban entre las sillas ajenos a que la mayor parte de las intervenciones tenían referencias a ellos. En ese sentido, la poetisa asturiana Vanesa Gutiérrez, afirmó que las bibliotecas y los ateneos obreros son espacios donde la mayor parte de los asturianos se ha criado. «Si en ellos no se promueve la cultura, no sé cómo pretenden hacerlo», señaló.

También el presidente de la Asociación de Escritores de Asturias, Rubén Darío, quiso aprovechar el acto para manifestar el apoyo de este colectivo a cualquier iniciativa, «ya sea por el recorte de las bibliotecas o en cualquier otro ámbito cultural», señaló. La intervención de Carmen Prieto, en representación de los bibliotecarios afectados, fue una de las más tajantes. Resaltó que esta situación se produce en Oviedo cuando Asturias muestra el índice de comprensión de lectura más bajo de España. «Con 480.000 usuarios, este cierre hace que la ciudad no sea ni tan heroica, ni tan invicta, ni tan noble», criticó, desatando la ovación del público.

viernes, 4 de abril de 2008

Más de 15 asociaciones respaldan la plataforma en favor de las bibliotecas


x C.Urias (El Comercio)


Políticamente, poco más se puede hacer. Ahora es el turno de que la sociedad civil se organice. Ésta es la idea que el Grupo Municipal Socialista y Ciudadanos por la Izquierda (ASCIZ) quisieron transmitir a las más de 15 asociaciones vecinales, clubes de lectura y sindicatos que ayer apoyaron la creación de una plataforma en defensa de las bibliotecas.


El objetivo es conseguir, a través de la presión social, que el Ayuntamiento no continúe con el proyecto de reducir a la mitad el número de bibliotecarios de la red municipal. «Desde el punto de vista político ya está hecho casi todo, son los ciudadanos los que tienen que tomar las riendas, y salir a decir algo frente a las aberraciones que se están cometiendo en esta ciudad», apuntó la portavoz del Grupo Municipal Socialista en Oviedo, Paloma Sainz, durante el encuentro que mantuvieron ayer con los vecinos en la Biblioteca de El Fontán.


Entre las medidas propuestas, se baraja la de presentar todas las firmas recogidas a través de Internet en el Registro Municipal en un acto que debería servir para forzar un replanteamiento dentro del equipo de gobierno del Ayuntamiento. ¿Cuándo? Pues nada mejor que el Día del Libro, el próximo 23 de abril. Es la fecha que barajan para iniciar las manifestaciones de aquellos vecinos contrarios a lo que califican de «atentado a la cultura» y «agresión sin precedentes».


Junto a la recogida de firmas, se perfilaba también la idea de crear un encuentro de lectura con personas relevantes de la cultura asturiana abierto a todo el mundo. Este acto, según propuso el concejal por Ciudadanos por la Izquierda, Roberto Sánchez Ramos, tendría lugar el mismo 23 de abril a las 19.00 horas en la Biblioteca Pública de El Fontán.


Las asociaciones presentes en el encuentro, como las de la Corredoria, Teatinos, Las Campas, Pumarín, Trubia o La Ería, también quisieron plantear sus propuestas. El diseño de carteles o la creación de una Biblioteca Popular, propuesta por la Asociación de Vecinos de Trubia, un barrio que no dispone de biblioteca desde el pasado 11 de marzo, fueron otras de las ideas barajadas.


Esta movilización responde a la decisión tomada el pasado mes de marzo por el Ayuntamiento de no renovar los contratos de los 12 bibliotecarios que trabajan en la red municipal. Los puestos serán reducidos a la mitad y cada uno de los nuevos contratados deberá gestionar dos bibliotecas, lo que conlleva, a juicio de los vecinos, un agravio hacia los barrios.


Para firmar en apoyo a las bibliotecarias de Oviedo


miércoles, 26 de marzo de 2008

Entrevista a Diego Díaz, representante del Foro de Urbanismo Crítico


x Victor G. Calleja (La Voz de Asturias)
Si es cierto que la ciudad despertó con la movilización contra las tres torres proyectadas para la parcela de la antigua estación de El Vasco, las popularmente conocidas como "las trillizas", Diego Díaz formó parte de los que menearon al Oviedo dormido. Este joven licenciado en Historia es miembro del Foro de Urbanismo Crítico, organización que nació hace poco más de un año para luchar contra la especulación urbanística de los terrenos de la fabrica de armas de La Vega.
-- Por qué cree que el alcalde, Gabino de Lorenzo, tira las trillizas?
-- Las paraliza en un contexto de elecciones, en las que se presenta como candidato por el Partido Popular (PP). Ve que hay que frenar cualquier cosa que pueda dañar su imagen pública. Además, empieza a percibir un cierto cansancio de la ciudadanía ovetense y ve que surgen movimientos de protesta por el urbanismo que se ha hecho en Oviedo. El alcalde decide parar las torres para desactivar un movimiento embrionario que le puede dar problemas.
-- Qué habría que hacer en esa parcela?
-- Tenemos que abrir un debate ciudadano para crear un espacio con buena parte de servicios públicos. En esta historia partimos de un error. El exalcalde Antonio Masip decidió tirar la antigua estación de El Vasco. Si se hubiera mantenido, tendríamos allí un verdadero edificio emblemático y no una horterada de Santiago Calatrava.
-- Entonces, cuál era el problema de las torres?
-- Eran un atentado total contra el casco antiguo. Pero además, se trataba de regalar suelo público para uso privado y enriquecimiento de unas pocas familias. Y hay otra tercera cuestión. Frente a lo que han dicho algunos arquitectos palmeros de la política urbanística de Oviedo, los rascacielos nunca son una alternativa de arquitectura sostenible, porque consumen una cantidad desmesurada de energía.
-- Y las torres que proyecta Patxi Mangado en San Lázaro?
-- Para mí es lo mismo aunque la última palabra la tendrán los vecinos. Pero sigue siendo un error regalar suelo público para construir vivienda, porque Oviedo no tiene esa necesidad. En la ciudad hay 20.000 pisos vacíos. El crecimiento del sector inmobiliario es superior al demográfico, por lo que se construyen viviendas sólo para los especuladores.
-- En qué medida se debe tener en cuenta la opinión de los vecinos para hacer ciudad?
-- La ciudad pertenece a los vecinos, al menos en un sistema democrático. El problema es que las instituciones han intentado mantener a la ciudad alejada de las decisiones urbanísticas. El Foro de Urbanismo Crítico nace con la idea de que los ciudadanos intervengamos en los debates y fiscalicemos lo que hacen los políticos.
-- Ahora se decía que la ciudad ha despertado. Es decir, que estaba dormida.
-- Clarín ya decía que "la heroica ciudad dormía la siesta". Mientras Oviedo dormía, múltiples pícaros y trileros se han dedicado a vaciarle los bolsillos y hacer un modelo de ciudad que no interesa a la gente, sino a los intereses privados.
-- Cuáles serían las principales amenazas?
-- Creo que son cuatro. La parcela del Vasco, los terrenos de la fábrica de armas de La Vega --un conjunto histórico sin comparación en España--, la fábrica de gas y el espacio que quedará libre en El Cristo con el traslado del hospital. En los próximos meses, los buitres de la especulación se lanzarán sobre esos terrenos. Y también están muy descuidados los espacios rurales de la ciudad. Oviedo necesita un verdadero cinturón verde. El diálogo entre la ciudad y el campo se está perdiendo por políticas agresivas en mateia urbanística.

sábado, 15 de marzo de 2008

El nuevo urbanismo de Oviedo

x Miguel Moro


La reciente decisión del gobierno del Ayuntamiento de Oviedo, encabezado por Gabino de Lorenzo, de construir tres rascacielos en una céntrica parcela de la ciudad, ha tenido un resultado inesperado. Los envites urbanísticos que la ciudad ha venido sufriendo en las últimas dos décadas apenas sí han conocido momentos puntuales de oposición; las actuaciones en materia urbanística del Partido Popular, al mando del Ayuntamiento de Oviedo desde 1991, han venido cosechando la aprobación casi unánime de ciudadanía, turistas y congresistas. La escasa oposición popular a tal o cual actuación, oposición casi siempre fallida, ha sido tildada en muchas ocasiones de retrógrada o manipulada por los “enemigos de Oviedo”.


Sin embargo, la decisión de modificar el Plan General de Ordenación Urbana para construir las mencionadas torres, un acto que acaso a la Alcaldía, a los promotores y al arquitecto se les antojaba un paseo triunfal, parece haber despertado a la ciudad de su prolongado letargo. Más de cuarenta sugerencias a la modificación del PGOU, acompañadas de miles de firmas, un certero informe de la Unesco y un insólito clima de movilización ciudadana han movido a la Alcaldía a emitir una nota de prensa ---escueta y sin firmar y, por tanto, de nula relevancia administrativa y jurídica--- anunciando la paralización del proyecto; pero, por añadidura, ha sacado a la palestra el debate sobre el modelo de ciudad, sobre los criterios que deben presidir las transformaciones urbanas de este Oviedo maltrecho en cuya historia reciente la especulación urbanística de dejado una huella ya prácticamente imborrable.La ciudad del presente es fruto de la historia, de las decisiones y lógicas urbanísticas que han configurado su entramado. Analizar la historia de Oviedo nos muestra una serie de continuidades que permiten comprender mejor la configuración de la urbe actual; clasismo, ausencia de planificación y sumisión del urbanismo a los intereses de las grandes familias son constantes que se repiten, cual si de una fatalidad se tratase, en el pasado y en el presente de la ciudad.

Oviedo en la Edad Contemporánea


Elemento canalizador del comercio y las finanzas del conjunto de la región, Oviedo ha desarrollado históricamente un papel económico y social mayoritariamente terciario, ligado decisivamente a su función capitalina y a su carácter de sede universitaria y arzobispal. A diferencia de lo que ocurre en otras ciudades asturianas, la industria conoce una débil implantación a lo largo de los siglos XIX y XX, con una sola excepción de envergadura: la Fábrica de Armas de La Vega, actualmente propiedad de la multinacional estadounidense General Dynamics y en trance de traslado. Rechazo de la industria y función terciaria constituyen dos constantes en el último siglo y medio de historia de la ciudad, que por ello mismo ha ido cobrando un carácter y una estética notoriamente burguesa y señorial. El desarrollo del Ensanche de la ciudad (el barrio de Uría) se produce de manera paulatina a partir del año 1878; en ausencia de Ley de Ensanche que lo regule, al calor de su desarrollo tendrá lugar una considerable retención de terrenos con fines especulativos. La escasa regulación del crecimiento y las transformaciones urbanas son desde entonces una constante en la historia de la ciudad.




En el urbanismo de posguerra se consolida una separación del crecimiento urbano en dos direcciones socialmente diferenciadas: la zona alta, en dirección suroeste (Llamaquique, Buenavista, etcétera), lugar de residencia de las clases más solventes; y la zona baja, en dirección noreste (Tenderina, Pumarín, Teatinos, Rubín, etcétera), zona de crecimiento de los barrios populares. El urbanismo desarrollista del barrio masa, durante los años sesenta y setenta, deja una profunda impronta en dichos barrios, segregados del casco urbano, mal comunicados y casi totalmente carentes de equipamientos.




La década de los ochenta se caracteriza, en contraposición a la época del barrio masa, por una detención casi total del crecimiento espacial de la ciudad. En su defecto, se produce un crecimiento hacia dentro en el que los inmuebles tienden a ocupar los intersticios y espacios libres, produciendo un agudo macizado del espacio urbano y cerrando la posibilidad de abrir espacios verdes públicos para el disfrute de la población. Como parte de este proceso, a comienzos de los noventa comienza una operación, engañosamente denominada Cinturón Verde, que se ha desarrollado durante más de una década. La operación consiste en el levantamiento del ferrocarril de vía estrecha que, uniendo la antigua estación de “El Vasco” (un singular y valioso edificio de principios de siglo derribado en 1989, siendo alcalde Antonio Masip, del PSOE) con la de “Económicos”, transcurría bordeando por el este el centro urbano. A pesar del nombre de la operación, el terreno liberado al eliminar el camino de hierro se colmatará no con espacios verdes sino con bloques residenciales de elevado estatus, junto con un importante número de aparcamientos subterráneos gestionados por una entidad privada.




Veinte años de especulación inmobiliaria




A pesar de contar con un censo de más de veinte mil viviendas vacías, desde mediados de los noventa se inicia en Oviedo, bajo los auspicios de la iniciativa pública, un extenso proceso de incorporación de nuevos espacios a la trama urbana. En líneas generales, la incorporación de nuevos terrenos urbanizables viene a reproducir la segregación espacial acaecida históricamente, con una serie de “barrios altos” (Monte Cerrao, La Ería, Olivares, Monte Canales) de lujo, con creciente predominio de la vivienda unifamiliar, y otros barrios, en los que se concentra la vivienda protegida, segregados, faltos de equipamientos y pésimamente comunicados. El nuevo Plan General de Ordenación Urbana (2006) simboliza la subordinación de la planificación urbana a la industria del ladrillo (cada vez más hegemónica en la economía asturiana) y viene a intensificar aún más este desbocado crecimiento espacial, que se produce a expensas de otros usos del territorio (agrícola e industrial), los cuales, como es habitual, se expulsan a lugares crecientemente alejados de los núcleos urbanos. El PGOU de 2006, en efecto, clasifica como urbanizables varios miles de hectáreas de terreno, consagrando tres direcciones principales de crecimiento: la dirección oeste (en la que se prevé un continuo urbano hasta llegar al núcleo de San Claudio, pueblo del municipio en el que se planifica asimismo un intenso proceso edificatorio), la noreste (dirección en la cual el crecimiento asume ya un carácter supramunicipal, afectando a los municipios limítrofes de Siero y Llanera, en el contexto de la tan moderna y vanagloriada “Ciudad Astur”) y la sur (hacia donde se prevé un crecimiento basado en vivienda unifamiliar de lujo formando también un continuo entre Oviedo y La Manjoya y destruyendo parte de La Zoreda, uno de los pocos bosques de arbolado autóctono con los que cuenta el concejo).El crecimiento espacial ha venido acompañado, al igual que en otras muchas ciudades, de un proceso de renovación y modernización del casco urbano. La remodelación de los inmuebles, las más de las veces, se ha producido mediante el derribo y reconstrucción de los existentes (por ejemplo en la Plaza del Fontán) o, a lo sumo, mediante la conservación de la fachada y el vaciamiento interior. Pero, además, dicha remodelación ha constituido el mecanismo de una acusada sustitución de clase, en la que los contenidos populares del casco antiguo se han sustituido por sectores sociales de elevados ingresos. En algunos casos, los pisos remodelados en el centro de Oviedo han llegado a superar los seis mil euros por metro construido. Dicha gentrificación social ha venido acompañada, además, de una importante gentrificación comercial, con la privatización del mercado de abastos y la progresiva eliminación del comercio de barrio a resultas de la implantación de grandes superficies tales como Mercadona. Cabe destacar que la remodelación inmobiliaria está afectando también a diversos barrios de tradicional contenido obrero y popular (los barrios de Pumarín y Rubín, por ejemplo), ejerciendo una intensa presión sobre los inmuebles más vetustos y conllevando una considerable destrucción del patrimonio edificado.




La política municipal practicada en las últimas dos décadas ha potenciado el encarecimiento generalizado de la vivienda, enajenando el patrimonio municipal de suelo procedente de los aprovechamientos urbanísticos y negándose a edificar vivienda de protección pública a precios asequibles. En su defecto, la iniciativa pública estatal y autonómica ---más como parte de su apoyo a la industria del ladrillo que con genuinos fines sociales--- ha apostado recientemente por una engañosa forma de vivienda protegida, a razón de 83.000 euros el apartamento de 45 metros construidos o de 132.000 el piso de 80 metros. Dicha vivienda, supuestamente asequible, irá ubicada en los terrenos más segregados y alejados del centro urbano, principalmente el entorno de San Claudio, al oeste, y el de Colloto, al este.




El “nuevo urbanismo” de Oviedo




En los últimos quince años, han sido muchas las transformaciones espaciales y sociales experimentadas por la ciudad de Oviedo; y también muy acusada la subordinación de su urbanismo a los intereses de grandes propietarios de suelo y empresas inmobiliarias. En la presente década, estas transformaciones se intensifican y asumen algunos rasgos novedosos, anunciando la configuración de un nuevo urbanismo en la ciudad.




Henri Lefebvre, probablemente uno de los autores que más aportaciones ha realizado al pensamiento crítico sobre la ciudad, plantea en La production de l’espace que sobre el espacio natural se superpone un espacio de carácter social y que, además, en el modo de producción capitalista aquél pierde relevancia frente a éste. El capitalismo no sólo produce mercancías, sino que produce también un espacio acorde con el objetivo de la acumulación de capital. Pero, una vez producido, dicho espacio se convierte en una limitación, en una traba para la acumulación ulterior. Su renovación se vuelve por tanto necesaria, pero no tanto debido a su obsolescencia física, a las necesidades de la población o a los límites ecológicos del planeta, sino a la pura y simple necesidad de que la producción y re-producción del espacio continúen proporcionando beneficios al capital inmobiliario. En el Oviedo actual, las características del espacio natural van perdiendo relevancia frente a sus características sociales, su “segunda piel”; y los vientos del capital inmobiliario, poco dados a mantener inmutable la división del espacio, comienzan a poner en solfa la segregación social por barrios gestada en la ciudad a lo largo de la Modernidad.




En efecto, desde finales del siglo XIX se configuró en Oviedo, como en tantas otras ciudades, una estricta separación del espacio en clases sociales, una separación en la que la topografía (“barrios altos” del suroeste y “barrios bajos” del noreste, por añadidura húmedos y con nieblas persistentes) se correspondía con el estatus social. Es cierto que el urbanismo reciente, y el que se avecina en un futuro próximo, potencia esta separación al concentrar la vivienda de lujo en las zonas mejor situadas y la vivienda “protegida” en las menos aptas y más segregadas. Pero también lo es que las empresas inmobiliarias no obtienen sus beneficios solamente del crecimiento de la ciudad. La expansión de la zona noreste (el inmenso barrio de La Corredoria, que enlaza sin solución de continuidad con el núcleo de Lugones) ha otorgado una posición céntrica y bien comunicada a barrios que, a mediados del siglo XX, constituían el extrarradio popular y segregado de la ciudad. Dos hitos, promovidos por las Administraciones municipal y autonómica, han impulsado este proceso: primero, la ya mencionada operación de Cinturón Verde, que eliminando el elemento de rechazo que suponía la vía del ferrocarril, ha permitido abrir nuevas vías de comunicación (para el automóvil, por supuesto) sobre la antigua traza ferroviaria; segundo, el traslado del Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA) a la zona de Prado de la Vega, muy próximo, por cierto, al barrio de La Carisa, en su día el más mísero y segregado de la ciudad.




El sector noreste de la ciudad se halla, con todo ello, en pleno proceso de efervescencia, en una transformación acelerada sumamente lucrativa para la industria del ladrillo: basta comprobar el elevado número de grúas, visibles casi desde cualquier lugar de Oviedo. Se trata de un entorno caracterizado aún hoy por un uso abigarrado y complejo del espacio, en el que conviven edificaciones residenciales de diversa índole, naves de almacenaje y algunos retazos de agricultura familiar. Dicho abigarramiento, que produce las paradojas y contradicciones propias de las zonas de borde urbano en intensa transformación, va cediendo peso ante una creciente homogeneización, marcada, como es natural, por el uso residencial y las infraestructuras de transporte.Las viviendas populares conviven hoy en este espacio de modo contradictorio con edificios destinados a capas pudientes de la población; la construcción del nuevo HUCA está intensificando de manera notoria la demanda de pisos para el personal sanitario, y el lugar que podrían ocupar pisos de treinta o cuarenta millones de pesetas lo ocupan actualmente vetustas viviendas en alquiler con rentas, en ocasiones, de menos de diez mil pesetas mensuales. De ahí se sigue una intensa presión inmobiliaria sobre las edificaciones existentes, con demoliciones, desahucios y, en algunos casos, un deterioro físico sospechosamente acelerado.


Mientras tanto, el “centro” de la ciudad no permanece ajeno a estos aires de renovación espacial. La política del marketing urbano exige hoy en día, para poder competir con otras ciudades en inversiones, turismo y congresos, contar con edificios singulares firmados por un arquitecto de moda. Oviedo (o, más concretamente, la alianza formada por la Alcaldía, la Presidencia del Principado y dos grandes grupos empresariales de la región, los Cosmen y los Lago), temeroso de perder el tren de la modernidad, decide “fichar” a Santiago Calatrava, un arquitecto de origen valenciano y dudosa solvencia. Detrás de los dos grandes proyectos firmados por este individuo se esconden dos grandes operaciones especulativas en las cuales, para beneficio de Jovellanos XXI (Grupo Cosmen y Grupo Lago), el Ayuntamiento ha perdido las dos mejores parcelas de suelo público que aún quedaban en la ciudad.




En el barrio de Buenavista, el traslado del estadio de fútbol municipal “Carlos Tartiere” (el coste de la construcción del nuevo estadio ascendió a nueve mil millones de pesetas) dejó libre una gran parcela de titularidad municipal. El suelo (y el subsuelo) de dicha parcela fue cedida a coste cero a la sociedad Jovellanos XXI, que incluía en su propuesta un diseño de Santiago Calatrava, un inmenso edificio a todas luces desproporcionado con respecto a su entorno y que, hoy en curso de finalización, alberga varias Consejerías de la Administración autonómica, un Palacio de Congresos, un hotel de lujo y una gran superficie comercial. La viabilidad de la operación contó con el apoyo inestimable de la “izquierda plural” (PSOE-IU-BA) entonces en el gobierno asturiano. En primer lugar, comprando por 58 millones de euros las oficinas destinadas a albergar las nuevas sedes de las Consejerías de Cultura, Salud y Servicios Sociales, contra cuyo traslado se ha manifestado expresamente buena parte de su personal. Y en segundo lugar, avalando, a través de la Comisión de Urbanismo y Ordenación del Territorio (CUOTA), la apertura del nuevo centro comercial Espacio Buenavista, añadiendo una cláusula a la moratoria para nuevas superficies comerciales que exime de ella a las situadas en “edificios singulares”. Dicho centro comercial (“el nuevo centro de la moda en Oviedo”), que ha abierto recientemente sus puertas con mucho boato, supondrá sin duda la puntilla definitiva para el pequeño comercio de barrio que aún subsiste en la ciudad.




El devenir de la parcela de “El Vasco” (Jovellanos-2, según la denominación del PGOU) ha sido mucho más incierto. El solar, resultante del levantamiento de la vía estrecha ferroviaria que discurría por el interior de la ciudad, ha quedado, con la expansión de la urbe en dirección noreste, en una posición extremadamente céntrica y bien comunicada. El Ayuntamiento, tras comprar la parcela a Cinturón Verde, ha venido proyectando para ella usos muy diversos durante los últimos años: Palacio de las Artes, Facultad de Bellas Artes, Palacio Municipal...; edificios que habrían de ser construidos y gestionados por Jovellanos XXI, que contarían también con la firma del genial arquitecto y que se completarían con usos terciarios y residenciales, amén de un gran aparcamiento subterráneo. La falta de fondos municipales con los que acometer la edificación de tales inmuebles lleva al Ayuntamiento a abandonar tales proyectos de carácter “público” (llamémoslo así) y a vender la parcela íntegra a Jovellanos XXI por un precio de apenas seis millones de euros. Dicha sociedad proyecta entonces para el solar usos enteramente privados (oficinas, centro comercial y bloque de viviendas de seis alturas, más el mencionado aparcamiento subterráneo), previa modificación del proyecto de Santiago Calatrava, efectuada a cambio de la módica cantidad de doscientos millones de pesetas, a pagar por el Ayuntamiento de Oviedo.


Sin embargo, la historia de la parcela de “El Vasco”, tortuosa hasta entonces, no se detiene ahí. A mediados de enero de 2008 el Ayuntamiento propone una nueva modificación del PGOU en la mencionada parcela. La parca documentación aportada en el expediente informa de la sustitución de los bloques de seis alturas por tres rascacielos de 39 plantas, tres torres destinadas a albergar unas trescientas viviendas; por este nuevo proyecto, el despacho de Calatrava se embolsa más de 250 millones de pesetas adicionales. En las palabras de Alberto Mortera, concejal de Urbanismo, la modificación, “que conlleva sobre todo un notable incremento de los Espacios Libres públicos, representa la segunda aportación del arquitecto Calatrava a la ciudad de Oviedo, con unas características de singularidad equivalentes a las de sus obras más conocidas y destacadas mundialmente” (expediente 1190-080001 de 14 de enero de 2008). A pesar de contar con razones de tanto peso, Jovellanos XXI trata de impregnar la solicitud de modificación del PGOU con un plus de legitimidad encargando a Raúl Bocanegra, catedrático de Derecho Administrativo y jurista de gran prestigio, que se pronuncie acerca del interés público de la operación. Bocanegra (representante de la Universidad de Oviedo en la Comisión de Urbanismo y Ordenación del Territorio, dicho sea de paso) responde con sólidos argumentos jurídicos:


“Toda la operación encuentra una clara justificación desde la perspectiva de los intereses públicos a la vista de la conveniencia de que la ciudad cuente con un proyecto del Sr. Calatrava, objetivo que se ha seguido desde el principio, y a que el proyecto sea el más adecuado desde el punto de vista urbanístico y arquitectónico, sin cortapisas o condicionantes jurídicos innecesarios” (folio 48 del Anexo Documental 3, en el citado Expediente).




La magnitud de la propuesta arquitectónica para la parcela genera una movilización ciudadana desconocida en años, impulsada por organizaciones políticas, sociales y vecinales. Un certero informe del Consejo Internacional de Monumentos y Sitios (Icomos), de la Unesco, se pronuncia contra las torres, con argumentos de carácter jurídico, urbanístico y patrimonial: las tres torres habrían de situarse a pocos cientos de metros de la Cámara Santa de la Catedral, la Fuente de Foncalada y la Iglesia de San Julián de los Prados, tres monumentos con la categoría de Patrimonio de la Humanidad. El informe, calificado de frívolo y retrógrado por Alberto Mortera, insta a la Administración autonómica (particularmente a la Consejería de Cultura y a la CUOTA) a intervenir en el proceso y ejercer sus competencias.




¿Qué papel desempeña en el proceso dicha Administración? Las palabras de la Consejera de Cultura del 18 de febrero, afirmando rechazar la ubicación de las torres ---“lo idóneo sería situarlas en Buenavista”--- y su puntualización horas después explicando que se trataba de “una opinión personal” y que, ante todo, el Gobierno “respetaría la autonomía municipal”, dejan un escaso margen para la duda. Los apuros fiscales de ambas Administraciones ---obras faraónicas, indemnización de Villa Magdalena... todo ello en un entorno marcado por la “desceleración” de la inversión inmobiliaria--- les han obligado a volver la mirada, con más avidez aún que en pasado, a la recalificación de fincas urbanas como modo de obtener ingresos. El mecanismo es sencillo y perverso: a más edificabilidad, más plusvalías inmobiliarias, más beneficios para el propietario, el promotor y la propia Administración, encargada en un caso de recalificar (Ayuntamiento) y en el otro de bendecir la recalificación (CUOTA). ¿Y qué mejor modo de incrementar la edificabilidad de una parcela que apostando por la edificación en altura? El escandaloso silencio del Gobierno regional ante las torres de Calatrava induce a pensar que nos hallamos ante un quid pro quo entre ambas Administraciones: las “trillizas” de la parcela del Vasco a cambio de torres en las recién trasladadas Consejerías de la calle General Elorza, los terrenos del Hospital en El Cristo o el antiguo instituto de San Lázaro, parcelas todas ellas propiedad de la Administración regional.




La edificación en altura no es una vía para dotar a la ciudad de más “espacios libres públicos” ni para practicar un urbanismo menos agresivo con el territorio. Constituye, por el contrario, una apuesta arquitectónica radicalmente insostenible, con una extensa huella ecológica, y cuya principal finalidad es engrosar la cuenta de beneficios del gran capital inmobiliario. La retirada del proyecto de las “trillizas” de Calatrava, aunque todavía dudosa, constituye una pequeña gran victoria del movimiento ciudadano en Oviedo. Quizás ha llegado el momento de exigir que los dos grandes espacios de titularidad pública de los que aún dispone la ciudad (el de la Fábrica de la Vega y el del Hospital del Cristo) no sean pasto de la especulación inmobiliaria y el macizado urbanístico. Y más aún, el de reivindicar para Oviedo un urbanismo diferente, una forma de producir el espacio en la que el derecho a la ciudad de la población no se vea pisoteado por los intereses especulativos de unas pocas familias.


300 personas se manifiestan contra la especulación urbanística en Oviedo







Más de 300 personas secundaron ayer la concentración contra las Torres de Calatrava, concentración que se mantuvo tras el anuncio de Gabino de Lorenzo de rechazar el proyecto, ya que a entender de los convocantes legalmente el mismo seguí su curso administrativo.En la concentración hubo diferentes intervenciones; el Concejal de ASCIZ, Roberto Sánchez Ramos, Cambalache, ANA, Ecologistas en Acción, AA.VV Oviedo Antiguo y Asociación V de Vivienda. Todos coincidieron en la necesidad de recobrar este espacio para uso público, insistieron en la Convocatoria de una Comisión extraordinaria de Urbanismo para rechazar legalmente el proyecto, además de señalar la preocupación existente por la Fábrica de Armas, los solares del Cristo y General Elorza, de que sucumban a intereses especulativos.

sábado, 1 de marzo de 2008

Se mantiene la concentración del día 5 en El Vasco

Ecologistas en Acción, la Asociación de Vecinos del Oviedo Antiguo, Cambalache, el Foro de Urbanismo Crítico, la Asamblea de Ciudadanos por la Izquierda, V de Vivienda y Amigos de la Naturaleza Asturiana mantendrán la concentración convocada para el día 5 de marzo a las 19:30 en la confluencia de las calles Victor Chávarri y Gascona con dos objetivos:

a) conseguir que el Ayuntamiento haga un pronunciamiento firme y rotundo, con validez legal, asegurando que las torres no serán construidas.

b) reclamar un uso social de la parcela de El Vasco

Los colectivos convocantes consideran que ha sido la movilización ciudadana la que ha conseguido la rectificación del alcalde, y por eso esperan que la concentración del día 5 sirva para que los ciudadanos festejen su victoria contra los intereses especulativos.

Ciudadanía y expertos consiguen frenar el proyecto de Calatrava para El Vasco



El ayuntamiento de Oviedo da marcha atrás en el proyecto de las torres de Calatrava


x TeleAsturias


El proyecto del arquitecto valenciano Santiago Calatrava para la edificación de tres torres en la parcela de El Vasco, finalmente ha sido rechazado por el Ayuntamiento de Oviedo. El alcalde de la ciudad, Gabino de Lorenzo daba hoy la noticia mediante una nota de prensa.

En ella aseguraba que tras la evidente falta de consenso social y político ante un proyecto de esta envergadura había decidido rechazarlo e instar a la empresa Jovellanos XXI para que presente uno nuevo que resulte política y socialmente viable. El proyecto de las tres torres inclinadas de Calatrava de 133 metros cada una y 39 plantas se había convertido en uno de los temas más polémicos de esta legislatura en la ciudad, sobre todo después de que un informe del Comité Asesor de la UNESCO viera incompatible la obra con la protección del prerrománico asturiano.

jueves, 28 de febrero de 2008

¿Es este el Oviedo que te gustaría tener?




El Miércoles 5 a las 19:30 en el Centro de Estudios de "El Vasco" (C/Victor Chávarri esquina con Gascona) concentración contra las "trillizas" de calatrava y por un uso social de la parcela del Vasco. Convocan: Ecologistas en Acción, Asociación de Vecinos del Oviedo Antiguo, Amigos de la Naturaleza de Asturias, Asamblea de Ciudadanos por la Izquierda, Cambalache, Foro de urabanismo Crítico.




martes, 26 de febrero de 2008

Las Torres de Suso


x Roberto Sánchez Ramos "Rivi", concejal de la Asamblea de Ciudadanos por la Izquierda (ASCIZ)



“No son las piedras, son losseres humanos los que hacen la ciudad” Aristóteles


El nuevo tono moral que se presenta como aceptable, e incluso socialmente deseable, la realización de los apetitos más voraces de poder y de dinero, acabó haciendo de la construcción urbana una actitud especulativa más y motivando que ya no sea la ciudadanía sino el lucro apoyado por el hábil uso del cemento, el ladrillo y las influencias lo que de verdad hace la ciudad. Esos gigantes sin alma que significan las tres torres en la antigua parcela del Vasco escenifican la hegemonía del capitalismo más voraz y destructivo sobre las instituciones públicas, y los ciudadanos y ciudadanas que las sustentan.


LA GRAN MENTIRA DE LA PARCELA DEL VASCO


A finales de los años ochenta Oviedo contaba con una de las estaciones de trenes más interesantes de España, la Estación del Vasco (1906) situada en el centro de la ciudad. Su importancia arqueológica-industrial era de indudable interés, su ubicación a escasos metros de la catedral y del eje de la calle Uría no dejaba lugar a dudas para jugar un papel esencial en la dinámica cultural de la ciudad como lo han hecho edificios de similares características en ciudades como París con su antigua estación de ferrocarril, hoy convertida en el Museo D´Orsay. Pero en Oviedo, el “higienicismo” se convirtió en el pensamiento dominante y la estación se tiró “porque estaba sucia” y, además, un nuevo proyecto invadió el nuevo sueño urbanístico local.


El “Cinturón de Hierro” pasó a ser “Cinturón Verde” y éste pasó a ser un “Cinturón de Hormigón”. Por el medio la Ciudad de los Proyectos sepultaba el metro de Gabino y sus múltiples palacios. 20 años más tarde (1988-2008) la historia del gran engaño de la parcela de Jovellanos continúa. Lo que originalmente era un espacio público pasa a ser un espacio mixto para luego convertirse en un suelo privado. Las Torres de Calatrava se sirven de postre en una cena-espectáculo del mejor Hollywood local. Las tres torres ven la luz de la noche como consecuencia de un proceso trilero del urbanismo ovetense.


URBANISMO ESPECTACULAR

¿Por qué nos hablan de urbanismo cuando quieren decir especulación?


La nueva ciudad que se nos ofrece está basada en una arquitectura espectacular y fotogénica, propicia para los folletos turísticos y la promoción de una ciudad a través del universo de la imagen. Se trata de obras para ver más que para habitar o transitar. El ejemplo de las recientemente inauguradas oficinas de las consejerías de Cultura, Presidencia y de Salud Pública, a 57 metros de altura en Buenavista son el claro ejemplo de lo que afirmamos además de lo que nunca debería hacer un gobierno con los servicios y dineros públicos. El nuevo urbanismo convertido en curvaturas, alabeados, torsiones, efectismos premeditados, llevan a que los presupuestos se dupliquen o tripliquen en un ejercicio que se expone apolíneamente para la foto y no para la función social que deben de jugar estos edificios.En Suecia, Calatrava es el autor del edificio más alto y más costoso de la nación. El Turnig Torso inaugurado en 2005 en Mälmo, con 54 pisos y 147 viviendas de lujo, donde un Penthouse de 230 m2 cuesta cerca de 1.600.000 €.


Las obras del señor Calatrava son caras, antifuncionales, vistosas y fotogénicas. Las ciudades que deseen poseer un Calatrava deben saber a qué atenerse. Oviedo ya tiene un Calatrava que es incapaz de digerir urbanística y económicamente. ¿Es necesario un nuevo ejemplo?, ¿hace falta otra estafa faraónica?, ¿resistirá Oviedo este narcisismo posmoderno? ¿Quién demanda realmente estas bellezas evanescentes?, o por el contrario ¿interesan estas tres torres para asentar una nueva dialéctica entre Oviedo y Gijón?El reciente informe elaborado por el Consejo Internacional de Monumentos y Sitios de las UNESCO sobre las torres de Calatrava en la antigua Estación del Vasco ponen en evidencia como nunca se había hecho con anterioridad hasta que punto los intereses privados y la voracidad especulativa insaciable de unos pocos son capaces de destruir la historia milenaria de una ciudad, de nuestra ciudad, Oviedo.


Entre las torres de Calatrava y el cambio de cromos sobre otras torres que se avecinan y que convertirán a Asturias en un patético tablero de ajedrez, yo personalmente me quedo con la Torre de Suso.

Asciz llama a manifestarse contra las ´trillizas´ el día 5 en el Vasco


La Voz de Asturias


Los ciudadanos que estén en contra de las trillizas tienen una cita contra "esta trampa faraónica" el próximo 5 de marzo a las 19.30 horas en los alrededores del centro de estudios de El Vasco --calle Víctor Chávarri--, frente a la parcela en la que el arquitecto Calatrava proyecta las tres torres.


El concejal de Asciz, Roberto Sánchez Ramos Rivi , hizo un llamamiento "a todos los vecinos para que se manifiesten con sus autocarteles y expongan personalmente lo que miles de personas ya han presentado por escrito": el rechazo al cambio del PGOU para modificar la altura de las torres que se van a construir a 250 metros de la Catedral. Asciz presentó ayer su batería de alegaciones contra el proyecto de Calatrava, secundado por Amigos de la Naturaleza de Asturias (ANA), los vecinos del Oviedo Antiguo, Ecologistas en Acción, el Foro de Urbanismo Crítico y Cambalache.


Juan García, del Oviedo Antiguo, recordó las dos sentencias del Supremo que abren una nueva vertiente legislativa en caso de recurrir a la justicia. Por otro lado, cargó contra el concejal de Urbanismo, Alberto Mortera, que a su juicio "no merece crédito como ciudadano". Eduardo Menéndez, por Ecologistas en Acción, defendió el modelo de ciudad compacta como única posibilidad de desarrollo sostenible y se posicionó en contra de los "rascacielos, que representan el otro extremo". Diego Díaz, del foro de Urbanismo, instó a los ciudadanos a "dejar de ser espectadores y asumir protagonismo". Por Cambalache, Miguel Moro pidió secundar la manifestación "y crear un movimiento ciudadano capaz de parar el gabinismo".


"PUBLICACION FUNDAMENTAL" Todos coincidieron al recalcar que el periodo de información pública se ha realizado "vulnerando las normas esenciales del procedimiento" y en su documento se expone que la información municipal tiene que publicarse "en la web muncipal, los medios de comunicación y mediante edición de publicaciones, bandos y folletos". Consideran "fundamental" que, "dado el profundo cambio que dicha actuación supondría para Oviedo", se ofrezca a los ciudadanos una información lo más amplia posible. Y recuerdan que ninguna de las opciones se ha llevado a cabo "ni a través de bandos municipales" lo que supone vulnerar los preceptos y "no es una información imparcial".


Sus alegaciones chocan con la modificación de la parcela porque solo la alavan "la conveniencia de que la ciudad disponga de un conjunto residencial proyectado por Calatrava y liberar suelo para incrementar las alturas", algo que les resulta insuficiente. Además, argumentan que dicha modificación "incumple lo dispuesto en el artículo 109 del Texto Refundido de las disposiciones legales vigentes en materia de ordenación del territorio y urbanismo" del Principado. La última alegación recuerda que prima el interés colectivo de los vecinos.

viernes, 15 de febrero de 2008

300 personas en la asamblea contra las torres de Calatrava


La Asamblea de Ciudadanos por la Izquierda (ASCIZ), ANA, Cambalache, Ecologistas en Acción, y la Asociación de Vecinos del Oviedo Antiguo promovieron ayer entre los vecinos del casco antiguo una alegación al proyecto de construcción de las tres torres de 139 metros de altura que Santiago Calatrava ha diseñado para la parcela del Vasco, que promueve la empresa Jovellanos XXI. La alegación expresa «nuestra oposición a la construcción, así como a la modificación del Plan General de Ordenación Urbana», y considera «imprescindible que la parcela de Jovellanos recobre su carácter público inicial con el fin de dotar a esa parcela y al pueblo de Oviedo de equipamientos públicos que son necesarios para los ciudadanos». ASCIZ presentó a la firma esta alegación ayer, minutos antes de que comenzase una reunión para debatir sobre el proyecto en el hotel España. La reunión estuvo liderada por el portavoz de ASCIZ, Roberto Sánchez Ramos, que explicó su postura al centenar de personas presentes. Sánchez Ramos estuvo acompañado por Gema Adán, arqueóloga; Ana Taboada, abogada; Manuel Maurín, profesor de Geografía; Carlos Lastra, de la Asociación de Amigos de la Naturaleza (Ana); Juan García, de la Asociación de vecinos del Oviedo antiguo, y Miguel Moro, de la asociación Cambalache. El portavoz de ASCIZ aseguró que «no conozco en esta ciudad a nadie que le gusten las torres de Calatrava», reclamó la celebración de una consulta popular «para que se escuche lo que piensan los vecinos» y afirmó que «la oposición a las torres de Calatrava es poner los pilares para salvar la fábrica de la Vega, porque este proyecto es la punta del iceberg de movimientos más amplios para cambiar la ciudad, llevándose por delante una joya de la arqueología industrial española como es la Fábrica de Armas».

jueves, 14 de febrero de 2008

Nacen dos plataformas en contra de los últimos proyectos urbanísticos

Los nuevos proyectos no dejan indiferente a nadie. Las decisiones urbanísticas provocan corrillos y hasta plataformas en contra. En Oviedo pasó cuando se derribó la estación del Vasco o el chalé de Concha Heres, que dio paso a la sede del Banco de España. Y la historia se repite. Las tres torres de Calatrava, en la parcela de las antiguas vías férreas, y el futuro de la Fábrica de Armas de La Vega ha movido los resortes del movimiento ciudadano más crítico. Acaban de crearse dos grupos diferentes, con un mismo punto de mira: los desarrollos previstos a la entrada de la 'Y'.

LA FÁBRICA DE ARMAS

Foro por un urbanismo crítico.

Nació en defensa de la actividad y el patrimonio de la Fábrica de Armas de La Vega, pero en su agenda cabrán todos los problemas urbanísticos de la ciudad. Un grupo de personas ha creado el Foro por un Urbanismo Crítico de Oviedo. Aunque están vinculadas a la Universidad, partidos políticos, al colectivo Cambalache o grupos ecologistas, en este caso se 'suben' a la plataforma a título individual.

Entre ellos hay nombres conocidos, como el portavoz de Asamblea de Ciudadanos por la Izquierda, Roberto Sánchez Ramos, y el miembro de Cambalache Miguel Moro, autor de 'Oviedo detrás de la fachada', una visión crítica de los desarrollos urbanísticos a lo largo de los últimos años. Y en esa línea quiere seguir el foro. Habrá protestas y, antes, divulgación entre los ciudadanos. «La movilización empieza por la información», explica el edil. «Queremos abrir un debate ciudadano», añade. Aunque no dan muchos detalles, adelantan que una de sus primeras acciones será pedir la declaración para el conjunto de la fábrica como Bien de Interés Cultural (BIC), la máxima figura de protección patrimonial.

De momento, tiene una protección equivalente al BIC, como monumento, la capilla de Santa Bárbara. El claustro del viejo convento utilizado como nave cuenta con protección integral. El taller de cañones, diseñado por Sánchez del Río, está incluido en el Registro Industrial del Docomomo Ibérico. El entorno de protección de los dos primeros elementos alcanzaría al conjunto, al que hay que sumar el de la vecina iglesia pde Santullano. Además, el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) y en el Catálogo de Bienes de Interés de Oviedo está descrita como conjunto.

Es indivisible. «Es un conjunto industrial único en España y en Europa», justifica Moro. Y la única gran industria que queda en el casco urbano. Defienden los valores patrimoniales, y también quieren evitar que haya despidos de trabajadores, en juego por los planes de la empresa General Dynamics Santa Bárbara Sistemas de trasladar la producción a Trubia y La Coruña. Y sobre todo rechazan «el negocio de viviendas» que planea sobre estos 122.000 metros cuadrados.

Aplicando una edificabilidad menor incluso que la del entorno, calculan que las plusvalías sobre el solar superarían los 360 millones de euros. «Es un bocado absolutamente exquisito para la especulación inmobiliaria», ironiza Moro.

Detrás de estos intentos especulativos, que Sánchez Ramos bautizó con el nombre de «Wall Street de La Tenderina», hay «un pacto político, en el que participan Ayuntamiento y Principado y empresa».

La punta de lanza es la parcela de El Vasco, con las tres torres diseñadas por Calatrava. Según el edil, este proyecto marcará la edificabilidad en La Vega. Lo que se haga en Víctor Chávarri influirá si finalmente se va la industria. Por eso, los primeros esfuerzos del foro se centrarán en despertar el debate ciudadano y evitar que salga adelante el proyecto de las torres de Calatrava.

Por otra parte, Moro y Sánchez Ramos ven posibilidades para los chalés de los ingenieros y otros elementos de la fábrica que podrían reutilizarse como equipamientos públicos para La Tenderina y los barrios cercanos. Dan dos ideas, bibliotecas y escuelas de 0-3.

LAS TORRES DE CALATRAVA

Arquitectos y otros amigos

A finales de los 90, ya en los albores del nuevo siglo, la conservación de la fábrica de gas también provocó un movimiento ciudadano. Los que estaban detrás de él consiguieron la incoación del expediente de Bien de Interés Cultural (BIC), más de un lustro después todavía pendiente de cerrarse.

Hay gente de aquel grupo de Gas Ciudad en el foro citado. Otro está en el germen de otro grupo. Es el arquitecto José Ramón Fernández Molina, autor, además, del Inventario de Bienes de Interés del Concejo. Con Arturo Gutiérrez Terán, otros arquitectos y personas vinculadas a la Sociedad Cultural La Escandalera, están preparando una alegación contra el proyecto de las tres torres que Jovellanos XXI, con diseño de Calatrava, quiere construir en la parcela de El Vasco.

«Vamos a personarnos en la información pública», asegura Fernández Molina. Él mismo concibe este desarrollo urbanístico y otros proyectos a la entrada norte de la ciudad, como la losa de Santullano, los accesos a Oviedo o la Fábrica de Armas, como «fragmentos de una misma pieza» que tienen que tratarse como un todo, no por separado.

Ahora se apresuran con el proyecto más urgente, las 'trillizas', con sólo un mes de información pública. Urbanísticamente, ve la fábrica «como un elemento complementario a la losa». Eso sí, añade, «es intocable» dada su protección patrimonial actual, matiza el arquitecto . El Vasco es otra cosa.